São Paulo es una ciudad capaz de causar sensaciones diferentes. Polifacética, moderna, histórica, sentimental, es imposible no sentirse parte de ella en algún momento. Culturalmente grandiosa, la ciudad lo envuelve por todas partes, en todos los lugares y, sobre todo, a través de todos - y en todos - los sentidos.
Como cualquier gran metrópoli, sus centros urbanos están llenos de restaurantes sofisticados, encantadores cafés y delicias típicas de todas partes de Brasil para satisfacer a una población que busca arte, diversión y, por supuesto, gastronomía diversa.
Los muchos sabores de la ciudad no pueden quedar fuera de su recorrido. Reserve un día entero para uno de los paseos más deliciosos que podrá hacer en São Paulo: vamos al Mercado Central.
Pasear por el Mercado Municipal de São Paulo siempre es un placer: descubrirá que el café debería servirse siempre con trozos de damascos cristalizados; experimentará trozos de quesos venidos de todos los rincones del mundo; afinará el paladar con vinos finos en un ambiente descontracturado. En el Mercado es así, sorpresas y combinaciones conviviendo armoniosamente en más de 12 mil metros cuadrados de espacio.
Después de caminar entre muchos colores, tamaños y sabores, es momento de conocer el buque insignia, el poderoso, el enorme y famoso sándwich de mortadela. Son más de 200 gramos de mortadela rebanada bien fina concentrados entre un pan calentito y queso derretido. Para entenderlo hay que probarlo. Pruébelo.
Tome una cerveza bien fría y vamos a continuar el paseo por un mundo de delicias. ¿Qué tal un típico bocadillo brasileño para acompañarla? Tostados, envueltos en masa salada o caramelizada, no importa. En el Mercado encontrará una amplia selección de manís para combinar con su bebida preferida. ¿Quiere algo diferente? Puede ser arvejas con wasabi y pistachos iraníes.
¿Quiere más? El Mercado lo tiene. Con un sabor y una piel únicos, encontrará una de las mejores variedades de jamón del mundo. Sin olvidarnos de los ahumados, como los lomos de cerdo. ¿Usted es de los que aman el queso? Si no lo es, terminará siéndolo; y si lo es, prepárese para perderse entre tantos aromas. La cantidad es impresionante: parmesanos, provolones, bries y sus deliciosas variedades.
Para endulzar la vida, uno de los más solicitados es la increíble mezcla tropical de yogur helado con coberturas de pistachos, chocolate y frutas deshidratadas: se hace agua la boca. Si desea algo más saludable, el Mercado tiene frutas frescas por todas partes. Hay innumerables puestos que ofrecen trozos de frutas confitadas, o incluso cristalizadas, que le harán suspirar con cada bocado.
Para terminar el día en el paraíso gastronómico que es el Mercado Municipal, no puede olvidarse de degustar el pastel de bacalao. Son simplemente diez centímetros de largo, rellenos con muchísimo bacalao, envueltos en una masa seca y crujiente. Es irresistible. Deléitese con uno, dos o tres, y aproveche para llevarse algunos más para revivir y dejar grabado en la memoria y en el paladar el increíble día que vivió.